El empresario debió enfrentar las quejas de los compradores de neveras y en respuesta, reunió a los trabajadores en un patio fuera de la planta y, delante de ellos, fueron destruidos 76 refrigeradores de baja calidad. La reactivación de la planta inició c... másEl empresario debió enfrentar las quejas de los compradores de neveras y en respuesta, reunió a los trabajadores en un patio fuera de la planta y, delante de ellos, fueron destruidos 76 refrigeradores de baja calidad. La reactivación de la planta inició con ese ataque de martillo simbólico.